Acción Mutante y El día de la bestia.

Como el cine español no me parece muy bueno salvo honrosas excepciones, voy a comentar estas excepciones que mejoran mucho el resto de propuestas de un cine patrio muy influenciado por temas que no son de mis favoritos. Alex de la Iglesia es un director de Bilbao que ha realizado muchas películas con disparidad de temas y grandes argumentos que podrán gustar más o menos, pero traen algo de novedad al repetitivo temario del resto de producciones españolas.

 En 1993 la productora del gran Pedro Almodovar le dio la oportunidad a un director novel de dirigir su primera película 'Acción Mutante' y el resultado fue algo nunca visto en el cine español. Una película de acción, critica social y mucho gore, tanto como una película de zombis. Protagonizada por Antonio Resines y Alex Angulo y con cameos de otros muchos actores geniales. En una sociedad clasista donde los ricos viven en la perfección física, los pobres y deformes se rebelan atentando contra el sistema a base de atentados y un secuestro que empieza bien y acaba muy mal. Un trabajo genial que marca el principio de una carrera donde el sello del director nunca a cambiado.

El triunfo de público y crítica le llego en 1995 al director gracias a 'El Día de la Bestia'. Lo que anteriormente fue tratado como 'cine gamberro' ahora era tratado como cine de calidad en la prensa y de masas en los cines gracias a una buena distribución y publicidad. El argumento muy rebuscado, pero entretenido, con grandes dosis de humor y unos efectos especiales que encantaron al público la hicieron la mejor película española en mucho tiempo. Ganando varios premios Goya y otros premios en festivales de cine fantástico. Esta película, forma junto a 'La Comunidad', el grupo de las mejores películas del director en mi opinión.

Esta vez los protagonistas eran Alex Angulo interpretando al padre Ángel y un actor que empezaba a ser muy famoso, Santiago Segura interpretando a José María, un dependiente en una tienda de música. Juntos se unen en la búsqueda de una conspiración maléfica que quiere traer al demonio a la tierra. Contactan con un charlatán televisivo, el doctor Cavan, quien primero no les cree y después se vuelve loco y les sigue incluso haciendo ritos ocultistas. Son perseguidos por toda la ciudad por una banda de extremistas llamado 'Limpia Madrid'. Finalmente llegan todos al enfrentamiento final en las azoteas de 'Las torres Kio' de Plaza Castilla donde incluso aparece un demonio.