Se gasta el tiempo, pasa un día más, nos queda un día menos.

Más de cinco años tiene ya este blog,
esta idea, esta tarea,
este entretenimiento, este aburrimiento.

De un tiempo a esta parte he ido dejando abandonado el blog por culpa del exceso de trabajo y la desgana de continuar contando historias que ya están contadas. El hastío de expresar unas opiniones que no influyen en el devenir del tiempo. En mostrar lo evidente que se obvia constantemente.

No se si seguiré escribiendo más en 2016, primero tengo que completar las entradas que no he realizado para 2015, lo que sí es seguro que me lo tomaré con la calma que requiere una tarea que no es un obligación. Solamente un desahogo para esta frustración que me acompaña cada día.