Yo nunca duermo, solamente sueño.

jueves, 2 de octubre de 2014

La religión es el opio del pueblo

Ultimamente hemos podido observar como la religión se mezcla con la política, tanto en España como en el mundo. Por aquí vemos como un gobierno muy influenciado por la rama más radical de la iglesia católica nos quiere imponer un modo de vida basado en sus creencias. En oriente medio vemos como los extremismos islámicos también imponen su religión a base de sangre y fuego. Todos los comportamientos de imposición de creencias son execrables, unos más dañinos que otros, pero son malas maneras de demostrar quién tiene la razón. Esto contrasta con los líderes representativos, como el Papa católico, quien de cara a los medios proclama otros comportamientos. Las doctrinas religiosas, tanto de unos como de otros se basan en el miedo. El pecado, el cielo, el dios benevolente por un lado y castigador por el otro. Todas las religiones tienen un camino que seguir, unas normas que cumplir y a unos líderes que obedecer. Es reseñable, que tanto unos como otros llevan varios siglos reescribiendo sus escrituras para adaptarlas a los tiempos que se viven en ese momento.

Elegir una religión es como elegir un equipo de fútbol. Tienes más posibilidades de caer en los brazos del que tienes más cerca, en tu ciudad o país. También puedes ser embelesado por el más poderoso, que aunque no sea dominante. Es una practica muy humana la de subirse al caballo ganador, aunque sea por simple supervivencia. La evolución de las religiones ha sido muy sorprendente. En el amanecer de la humanidad se idolatraban los fenómenos naturales o los astros. Pasamos después a deidades de forma humana que representan a dichos fenómenos. Después llegaron las creencias a deidades que naciendo humanos, adquirieron la divinidad con una vida consagrada.  Entre dichas épocas tenemos las mezclas variadas de entre estas tres. Unas más duraderas que otras, pero todas intentando erradicar las demás de maneras violentas o por erosión.

Entre todos los líderes mundiales de toda la historia, ha habido los que se han sabido adaptar al cambio de religión como Constantino en el Imperio Romano o como Ciro el Grande en Persia. Este último es conocido por la tolerancia con todas las creencias de las muchas civilizaciones que formaron su gran imperio. Algo que intentó imitar Alejandro Magno posteriormente, aunque esto fue algo que no entendieron sus generales y fue una de las causas de su asesinato. Cambiando de tema, pero no de fondo, tengo que comentar mi descontento con la inclusión de la religión en el juego Civilization. Aunque refleja muy bien las guerras de influencia que han ocurrido en el mundo, no lo veo muy adaptado a la realidad histórica. Me imagino que habrá sido un intento de hacer más resista el juego, pero como es una imposición que se tiene que jugar con el resto, no queda más remedio que aceptarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario