Tras un año de programación intensiva. Utilizando este nuevo lenguaje salido de las mentes de los ingenieros de Apple. Ya puedo dar una opinión con argumentos. La evolución del lenguaje, después de varias actualizaciones, que le han llevado a la versión 2 en las fechas cuando escribo esta entrada, ha dado una versión estable y potente de un lenguaje de programación comparable al resto de sus competidores. Sumado a la declaración de la futura liberación del código para poder utilizar Swift en otras plataformas. Profetizan un futuro muy fructuoso al lenguaje. Mis primeros contactos con Swift fueron muy complicados, pero a base de esfuerzo he conseguido entender el funcionamiento del lenguaje.
Con una estructura muy similar al lenguaje JavaScript, pone mucho énfasis en el manejo de la memoria. Cambiando la forma de declarar las variables para que tengamos definido desde el principio lo perdurable y lo eventual. Aunque los métodos y clases siguen teniendo la estructura del lenguaje C, se ve un cambio en querer agregar las estructuras simplificadas que han adoptado otros lenguajes hace un tiempo. Al principio me costó acostumbrarme a no tener que cerrar las líneas con el carácter ';' algo que en realidad es trivial y tiene sentido eliminar. Como siempre, tengo que ponerle un pero y es la integración entre lenguajes, al añadir una clase de Swift dentro de un proyecto de Objective-C da muchos problemas. Esto me ha servido para realizar los proyectos desde el principio nativos en Swift, para aprender más, pero no para ser un experto todavía.
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