La vida es una partida de ajedrez sencilla que nosotros mismos hacemos complicada, donde no podemos pensar los movimientos, porque si decidimos mal, no podemos conseguir lo que ansiamos y si decidimos bien, pero tarde, también perdemos nuestra oportunidad.
Huir hacia adelante para escapar de nuestras decisiones y mirar hacia atrás
para ver los errores para repetirlos una y otra vez. Que es más triste, tener lo que se desea y perderlo o no tenerlo nunca y seguir queriéndolo.
El amor me ha rozado y yo cuenta no me he dado.
Ella me ha esperado pero yo no he llegado.
Tu eres la última oportunidad que el destino me ha dado,
que como todas las anteriores he malgastado.
El tiempo ha pasado y otra vez solo me he quedado.
Tu ya me has olvidado, pero yo hoy te he recordado.
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