Más deprisa en el cine...A todo gas 1 y 2

Esta saga de películas basadas en las carreras ilegales de coches y el mundo del 'Tunning' es muy entretenida. Aunque la calidad no sea mucha, la gasolina se mezcla con la adrenalina y crea algo muy bueno.

Estrenada en 2001, fue un autentico bombazo, triunfó gracias al tema que trataba, como lo trataba y por sus carismáticos personajes. El título original es 'The Fast and the Furious' y fue dirigida por Rob Cohen, un experto en películas de acción. La critica no la trató bien, pero el publico la fue a ver en masa a los cines. El argumento es el mismo de otras películas, un policía se infiltra en el mundillo de las carreras ilegales, donde se enamora de la hermana del más famoso de los corredores. El protagonista tiene que decidir entre sus sentimientos y el deber como policía. Las escenas están muy bien realizadas y los coches son los que suelen triunfar en las reuniones de 'Tunning'.

Dominic Toretto (Vin Diesel) es un corredor de carreras ilegales, junto con su novia Letty (Michelle Rodriguez) conocen a un extraño novato. Brian O'Conner (Paul Walker) un policía enviado a investigar unos robos relacionados con dichas carreras, conoce a Mia (Jordana Brewster). Esta resulta ser la hermana de Toretto y convencerá a su hermano para que acepte a O'Conner para luchar contra otra banda rival, comandada por Johnny Tran (Rick Yune) a la que la policía atribuye erróneamente los robos. Al final se descubre que la banda de Toretto es la culpable y O'Conner, en una decisión que le cuesta el puesto, le deja escapar.

El éxito llama a varias continuaciones, 'A todo gas 2' fue estrenada en 2003. Sin Vin Diesel en el reparto pero manteniendo el argumento de las carreras ilegales y el 'tunning'. Fue dirigida por John Singleton, quien le dio un toque muy despreocupado a la película, habiendo escenas en las que los actores se pasean como si estuvieran por su casa. La critica la dejó por los suelos y el publico fue a verla, pero solamente los aficionados al genero de acción y carreras. No consigió emular a su predecesora. La única nota favorable es el gran trabajo de preparación de los coches, muchos de los cuales son de la anterior entrega, pero reformados. Como curiosidad, el Nissan Skyline GT-R plateado pasó a ser propiedad del actor protagonista, Paul Walker después de la filmación, una vez reparado.

Al ya mencionado O'Connor se unieron en el reparto la policía Monica Fuentes (Eva Mendes) quien le encubre y el ex-convicto Roman Pearce (Tyrese Gibson) que le ayudará a investigar al mafioso Carter Verone (Cole Hauser). Otros corredores que colaboran con O'Connor son Suki (Devon Aoki) y Jimmy (Jin Auyeung). Otro que les ayudará es el dueño del taller, Tej Parker (Ludacris). Quién tiene una gan capacidad de organización como se comprueba en la gran escena donde aparecen decenas de coches tuneados saliendo de un gran almacén. Aunque en esta entrega las carreras están en segundo plano, están mejor planteadas.